La pasión hecha especia

Esta noche mi publicación va sin foto de receta, esta publicación es solo para hablar, debatir, opinar, pensar, discutir... para dejarse llevar.

Si vosotr@s escucháis la palabra CURRY, ¿qué sería lo primero que os vendría a la mente?. Haced un ejercicio de destreza mental y a ver que os sale, así, a la primera.

A mi la palabra curry me produce un pensamiento de estimulación de los sentidos. Mas allá de a que sabe o como definirla, es el sentimiento que me despierta solamente escuchar la palabra.

Y es que, estaréis conmigo, que una palabra siempre lleva asociada una imagen, un recuerdo, un estímulo, un olor y un sabor, y mucho más si hablamos de una especia, o mejor dicho, una mezcla de especias como es el curry.

El curry, el más famoso o dónde mas lo asociamos es a la India, es una mezcla de especias: gengibre, cilantro, pimienta, cúrcuma, guindilla... y muchas otras. No hay mezcla definitiva, si elementos esenciales, ya que como en una receta, cada uno tiene su punto y sus ingredientes. Especias tostadas (no todas) y reducidas a polvo que dan como resultado un polvo amarillento tirando a ocre... También existe el curry verde y el rojo, aunque estamos más acostumbrados al amarillo.

Sin duda cabe que lo asociareis muy bien con el famoso pollo al curry, pero no os olvidéis que unas verduras cocidas al dente y salteadas con curry verde o una ternera con uvas y curry rojo hacen delicias de los mejores paladares.

¿Y que combina con el curry?... Exacto! el arroz! Mejor un arroz aromático, basmati, de grano largo, ligero aroma a azahar... Es el punto de dulzor fabuloso para contrarrestar el picante. Unas pasas, unos orejones, almendras tostadas... darán el punto final para un contraste de texturas, sabores, aromas y colores.

Me declaro fiel amante del curry. Me apasiona su aroma embriagador, su sabor inconfundible, su olor al tostarlo...

Al olerlo no puedo evitar estimular mi apetito y al saborearlo evocarme a cenas cálidas y con velas, tranquilas y pausadas, intensas y sabrosas... y de color dorado.

No os olvidéis que lo más importante de todo es con quien lo compartes, y yo, lo hago con todos vosotr@s, que para mi, es la mejor sensación.

Entonces qué. ¿nos embarcamos al mundo mas lejano evocándonos con esta maravillosa especia? El té moruno lo ponéis vosotr@s.

Os espero a tod@s.

Feliz noche.